Me pareció que eras eterno. Hoy me dicen que te alejaste de toda esta gran barra y fue un golpe al corazón querido “Gato” Mignini. Un amigo incondicional, siempre dispuesto a ayudar. Tenías mucho todavía, con sus 72, pero esa maldita enfermedad te alejo hasta el próximo partido.
Fuiste el día y la noche. El sol y la luna. En cualquier lugar de tu Mar del Plata te encontraba. Por tu querido Kimberley, el club de tus amores, en una cancha, en algún boliche y siempre eras fuente de consulta.
Aquellos torneos de verano . Tu gran amistad con el “gordo” Martínez y su hijo, otro gran amigo como Silvio Martínez que dio su vida por el automovilismo. Después con Recova, después todo “gato”. Tu parrilla, tus amigos incondicionales.
Nos dejó un “militante” del deporte. Un amigo de la vida. El que trajó a Diego Maradona con Newells en una noche que Diego no jugo, desapareció el “Primacy”. 
Te bancaste todas. Diste todo por tu Mar del Plata, por el fútbol, por Kimberley. No tengo dudas que una gran porción de la ciudad te va a extrañar, te vamos a recordar siempre.
Diste todo por tus amigos…eras el amigo del barrio, que tiraba centros....hasta el próximo partido “gatito” Mignini. Chau Jorge, nos vemos en cualquier rincón de la vida y gracias por regalarme tu amistad y alguna copa en el brillo de la noche.