Mick, heredero de la dinastía del siete veces campeón mundial, habló de que “subordina todo” para llegar a la Máxima, al punto de que no tiene un plan B respecto a este deporte. 

Mick, de 21 años, ya está en la Fórmula 2 con el equipo Prema, a un paso de cumplir su deseo de estar en la F1. Cuando Mick nació, su padre aún no había iniciado su gran serie triunfal con Ferrari, con la que había debutado en 1996, aunque ya había ganado dos títulos de la F1 con Benetton (1994 y 1995). Sin embargo, el niño en ese entonces ya sentía el rugir de los motores en la sangre, sin saber que seguiría los pasos de su padre en el automovilismo.

La familia Schumacher está hoy pendiente del estado de salud de Michael, luego del grave accidente de esquí que sufrió a finales del 2013, en Meribel –en los Alpes franceses–, y por el que aún se encuentra en estado de coma.

¿Cómo ha sido su vida en el deporte del motor durante estos años de su carrera?

Creo que puedo ser absolutamente feliz con mi carrera hasta ahora. Lo hice paso a paso, la he llevado con paciencia y en el camino correcto. Comencé, como todos los pilotos, con el karting, y he pasado por la Fórmula 4, la Fórmula 3 y ahora en la Fórmula 2. Cuanto más te acercas a la Fórmula 1, más difícil se vuelve y más tiempo paso en las carreras, en las diferentes pistas y en todas las actividades a su alrededor, analizando cada milimétrico detalle que me puede hacer más veloz y andar mejor. Es una escalera que estoy subiendo y siento que ha ido muy bien hasta ahora. Después del karting, hice el paso correcto para comenzar en F4 y permanecer allí durante dos años, lo que también se aplica para la F3. Esos años me ayudaron mucho a desarrollarme como piloto de carreras y a adquirir experiencias valiosas.

¿Qué recuerdos tiene de su padre como piloto y como padre?

Creo que mi padre es el mejor piloto de carreras de todos los tiempos. Todavía era un niño pequeño durante sus años en Ferrari cuando no paraba de ganar, pero después de haber visto muchas de sus carreras en video, diría que el control de su auto fue excepcional. Siempre fue rápido y constante, sin importar las condiciones de carrera. Es un modelo por seguir. Eso sí, siempre que estoy en una pista, descubro cosas nuevas, independientemente del automóvil, entonces es importante para mí entender cómo vivía mi padre al volante.
Nadie llega a la Fórmula 1 porque importe su apellido. Si la gente me compara con mi padre, me enorgullece mucho, porque para mí es el mejor piloto de carreras de todos los tiempos. En F2 se aprende mucho sobre los neumáticos y otras cosas que ayudan para la F1.

"No hay un plan B y nunca lo hubo. Porque si hay un plan B, uno no se concentra realmente en el plan A". Integrante de la escudería italiana Prema, Mick,contó una anécdota para apoyar el deseo que se ha convertido en una obsesión prácticamente...

"Tenía once años y estaba sentado con mi padre en el camión de carreras dentro del kartódromo de Kerpen (Alemania). El me miró a los ojos y me preguntó: '¿Realmente lo quieres?'. Yo solo asentí. Desde entonces subordino todo al deseo de llegar a la Fórmula 1", relató Mick, quien espera hacer realidad su sueño en 2021.